Soraya
Este año empieza a estudiar lo que mas le gusta.
Quiere llegar a trabajar en un laboratorio entre tubos de ensayo, probetas, pipetas... y el mortero, que le recuerda mucho a cuando ayuda a su madre en la cocina, trasteando con todo lo que hay allí. Claro está que los resultados del trabajo de la cocina al del laboratorio no son comparables, aunque puedan lograrse descubrimientos muy interesantes en los dos casos.